
Redacción: Alvaro Carbajal periodista de la Unidad de Comunicaciones
Fotografías: Roberto Galindo
Luis Melgar Brizuela, docente investigador del Departamento de Letras, sostuvo que el 24 de julio de 2018 se constituye en un momento privilegiado para que desde las comunidades indígenas y desde la academia más consciente se dé la lucha por una nueva simbología de El Salvador y que se consideren como verdaderos próceres a nuestros indígenas mártires como Anastasio Aquino y no a los seudo-liberadores y seudo-próceres que nos han impuesto la cultura oficial.
Brizuela destacó que desde el 2016 han realizado cuatro proclamas con representantes indígenas, para que se reconozca al tata Aquino como verdadero padre de la patria, prócer y mártir de El Salvador; las proclamas se realizaron en diferentes lugares: Santiago Nonualco, en la plaza central de San Vicente, el parque Cuscatlán de San Salvador y otra en San Rafael Obrajuelo.
El profesor de Letras explicó que fue Roque Dalton quien declaró padre de la patria a Anastasio Aquino, agregó que Dalton entendió que el verdadero líder de las luchas populares y autóctonas fue Aquino y no Matías Delgado, ni Manuel José Arce y José Simeón Cañas, ni ninguno de los próceres oficiales.
El verdadero prócer y líder del pueblo indígena que entregó su vida por el pueblo nonualco y los sectores populares de nuestro país fue Anastasio Aquino, lo cual quiere decir que la Universidad de El Salvador puede profundizar en la investigación científica para reconstruir la ruta de rebelión, sus tácticas guerrilleras, sus conocimientos mágicos que lo hacen representar desde cierta óptica como un chamán, como un brujo que conocía de ritos ancestrales, pero además mantuvo una conducta honorable, dijo el académico.
Brizuela sostiene que desde la academia se debe rectificar y deslegitimar el discurso burdo de la literatura derechista que presenta a Anastasio Aquino como un bandido sacrílego que tomó la iglesia del Pilar y se puso la corona de San José; para Brizuela Aquino es el líder auténticamente nonualco, pipil y un maestro de las ciencias ancestrales que fue capaz de poner a temblar a la oligarquía de los criollos.
El investigador destacó el trabajo que desde el Departamento de Letras y la Escuela de Artes ha venido desarrollando, desde hace once años, en coordinación las comunidades indígenas y con la cual se ha proyectado a los pueblos originarios.
Brizuela elogió a los representantes indígenas a quienes catalogó como verdaderos dignatarios de los pipiles, nonualcos, chortic que se constituyen en parte del trifinio con una herencia maya espléndida y dijo que le alegra que se esté conmemorando al tata Aquino.
Las declaraciones de Brizuela se dieron el en marco del conversatorio Anastasio Aquino: legado permanente de la lucha de los pueblos originarios y por la dignificación de sus derechos.
En el conversatorio también participó Itz Tlan Balan, líder indígena representante del Consejo Nahuat Pipil, quien habló de la espiritualidad de Anastasio Aquino; Balan dijo que al hablar de espiritualidad es muy complejo y a la vez hermoso, y para hablar de Aquino no se tiene que ver como algo del pasado.
Para Balan, hablar de Anastasio Aquino representa para los pueblos originarios en constituirse y ser parte de la transformación de la sociedad, Aquino es el líder, el ejemplo de nuestra nación, para nosotros la nación es Cuscatan, Anastasio Aquino y otros indígenas cuando se estaba hablando de independencia se estaba hablando de libertad igual que cuando a nosotros nos habla de modernización nos hablan de privatización, creemos que vamos a mejorar, pero en realidad empeoramos.
Balan sostiene que cuando los criollos hablaban de independencia, estaban hablando de libertad para el criollo, no para nuestros ancestros, libertad para robar las tierras de nuestros ancestros, libertad para explotar los recursos y que para nosotros no son recursos, son elementos vivos, para nosotros el agua no es el recurso hídrico es nuestra abuela agua que tiene espíritu.
El agua tiene un espíritu, siente es un elemental de la naturaleza, el viento es el formador, la tierra es la madre tierra, el fuego es el abuelo fuego, todo esto conforma el gran corazón del universo y todos los seres humanos no somos ajenos a esto, somos parte de la tierra, explicó desde un enfoque espiritual Balan.
El representante indígena agregó que la tierra y el agua no nos pertenece, nos hemos desnaturalizado y hemos privatizado la tierra y ahí están unos desgraciados queriendo privatizar el agua, en realidad estos elementos no le pertenecen a nadie; Balan vuelve a hablar de Aquino y dijo que se le tildó como brujo y participaba en rituales diabólicos y se embriagaba y utilizaba cosas para conectarse con los demonios.
“Ahora hay que traducir eso, Anastasio Aquino participaba en ceremonias y participó en algunas con medicinas ancestrales, tenía esa conexión natural y es curioso porque él era cristiano católico, entonces el manejaba los dos procesos espirituales, pero lo satanizaron y lo vendieron como que él era el demonio, un bandolero”, dijo Balan.
Para Balan era todo lo contrario, Aquino era un hombre culto, educado, la gente lo quería, llevaba todo el control de la hacienda, incluso la historia oficial dice que era buen esposo, buen padre, amigo; entonces como es que de pronto se levante en armas, simple era un hombre justo que se indignaba ante la justicia y el proceso que él llevó era un hombre altamente espiritual.
En el conversatorio también participaron Rafael Mateo Latín alcalde del común de Izalco, quien llamó a la unidad de los pueblos indígenas para alcanzar el reconocimiento pleno de los pueblo originarios y sus reivindicaciones.
También participó Daniel Navas, miembro de la Secretaría de Relaciones Internacionales del FMLN, quien se refirió al reconocimiento que han tenido los pueblos originarios durante los dos gobiernos del partido de izquierda.
Otro de los participantes fue Marvin Arnoldo Cerón indígena representante de la región de los nonualcos, quien reclamó la invisibilización que el Estado hace de los pueblos indígenas, y dijo que Anastasio Aquino les heredó a los pueblos originarios la organización y resistencia.
La actividad sobre el martirio de Anastasio Aquino y las luchas de los pueblos originarios tuvo lugar el 24 de julio del corriente año en la sala de conferencias de edificio Alejandro Dagoberto Marroquín.